Esta vez escribo la entrada desde mi tierra, en la Península, en un momento en el que el otoño está entrando a lo grande, con lluvias y viento... pero, a pesar de este mal tiempo, yo estoy encantada de estar aquí en esta época porque en Tenerife no existe el otoño. En Canarias, al contrario de lo que piensan muchos, sí que cambia el tiempo, alrededor del mes de noviembre, empieza a hacer fresquito y paulatinamente empieza a entrar el invierno, eso sí, un invierno mucho más suave que en la Península. Pero lo que indudablemente no existe en Canarias es el otoño, no vemos caer la hojas, ni el cambio de color de los árboles a sus tonalidades ocres y rojas... ni el olor a lluvia y tierra mojada, ni ese olor a hoguera de pueblo que tanto echo de menos y es que, sin duda, el otoño es la estación que más me gusta. En fin, que estoy feliz de pasar estos días aquí.
A pesar del "mal tiempo" que me acompaña estos días, hoy os traigo una ensalada de lo más veraniega, aunque yo la hago todo el año. Es típica de la Toscana italiana, muy común en Florencia, en la que el sabor del pepino y la albahaca nos hacen recordar los largos y cálidos días de verano.
PANZANELLA:
- 3 o 4 tomates maduros.
- 2 pepinos.
- 1 cebolla.
- Albahaca.
- Pan.
- Ajo.
- Aceite.
- Vinagre.
- Sal.
Se corta el pan en rebanadas, se unta con el diente de ajo, se ponen en la bandeja de horno y se les echa un chorrito de aceite por encima. Se calientan al horno durante 10 minutos a 150º. Cuando finalice el tiempo, las sacamos del horno, las dejamos enfriar y las cortamos en trozos con las manos.
Cortamos los tomates, los pepinos y la cebolla. Picamos la albahaca. Mezclamos todo bien. Aliñamos con el aceite, el vinagre y la sal.
Como siempre, contadme qué os parece si la hacéis. ¡¡¡¡Buen fin de semana!!!!
